Descubra Milán desde las terrazas panorámicas del Duomo. Su exploración comienza en la Piazza del Duomo, donde le recibirá la imponente fachada de la catedral, adornada con estatuas, agujas y gárgolas. Con su guía, evite las largas colas para comprar entradas y diríjase directamente al ascensor.
Al subir en el ascensor, prepárese para el espectáculo que le espera en la cima de esta majestuosa obra maestra gótica. Una vez arriba, dé un paseo por la azotea y contemple las espectaculares vistas de Milán. En un día despejado, su mirada puede extenderse hasta los Alpes italianos, que marcan la frontera con Suiza.
Para una experiencia aún mejor, sube los últimos 50 escalones hasta el nivel más alto. Aquí te encontrarás cara a cara con la icónica estatua dorada de la Virgen María. Brillando majestuosamente sobre la aguja principal, es una vista que realmente resume la grandeza de esta extraordinaria ciudad.