Sólo hay una raza de caballos en Islandia, y se ha mantenido pura durante más de mil años: el caballo islandés. Estas simpáticas criaturas y sus guías especialmente adiestrados le acompañarán en una excursión por antiguos senderos de equitación.
Disfrutará de impresionantes paisajes llenos de campos de lava rocosos y paisajes invernales. Esta excursión es ideal tanto para principiantes como para jinetes experimentados, ya que los grupos se organizan por nivel de equitación. Esto significa que podrá disfrutar de su propia experiencia y aventura.
Esta es una oportunidad de probar algo diferente: los caballos islandeses son pequeñas criaturas, casi del tamaño de un poni, con crines prominentes y colas bajas. A pesar de su aparente delgadez, son capaces de una gran aceleración y velocidad. Una gran oportunidad de ser uno con la naturaleza.