Si has planeado un viaje a Venecia, ¡enhorabuena!, te esperan unas vacaciones de ensueño. Las calles estrellas, los canales, los puentes y las famosas góndolas de la «Serenissima» te robarán el corazón. Venecia parece sacada de un cuento de hadas, pero, desplazarse en una ciudad construida sobre más de cien islas conectadas por puentes, puede ser complicado.

La forma más fácil de moverse libremente por Venecia es utilizando el transporte público ACTV: los vaporettos o autobuses acuáticos que conectan las diferentes áreas de la ciudad, incluyendo el Lido y varias islas de la laguna, y los autobuses en Mestre, Marghera y en tierra firme. Compra el pase que te permite utilizar los autobuses y los vaporettos sin ningún límite y elige la validez del billete que más te convenga (desde 1 solo viaje hasta 7 días).

Si debes llegar al centro de la ciudad desde el aeropuerto, la solución más conveniente es utilizar un taxi acuático como el Venice Shuttle, una embarcación colectiva que conecta todos los días el aeropuerto Marco Polo y la Stazione Marittima con el centro de la ciudad. El número de paradas efectuadas en Venecia dependerá de las necesidades de los viajeros a bordo.

Alternativamente, puedes utilizar uno de los 34 barcos de la red de navegación Alilaguna, que con cinco líneas garantiza la conexión entre el aeropuerto Marco Polo, la Terminal de Cruceros, el centro de Venecia, el Lido, Murano y Punta Sabbioni. El billete de Alilaguna es válido por 72 horas e incluye un viaje en barco a Burano y Torcello.

Para ambas opciones, es recomendable comprar los billetes por Internet, para evitar las colas en las taquillas, especialmente en temporada alta, y las largas y agotadoras esperas con el equipaje.